La Plataforma Unitaria de la extrema derecha se dividió, estalló en pedazos, Rosales le ganó la pelea interna a la Machado, y a nadie puede asombrar que la oposición tóxica se hunda en el pantano, cuando lo único que puede exhibir son derrotas y más derrotas.
El 25 de marzo, a dos minutos para cerrar el lapso de postulación de los candidatos a la Presidencia, los partidos Nuevo Tiempo y Fuerza Vecinal inscribieron a Manuel Rosales, y Edmundo González se anotó como aspirante con la tarjeta de la “manito”. Esos son los hechos, lo demás es puro cuento.
La Machado no tiene partido ni tarjeta, a su tocaya no la inscribió Nuevo Tiempo ni la tarjeta de la MUD porque el candidato con opción, -según ellos-, es Rosales, ahora vienen con la mentira de las presiones del chavismo, esa es una patraña, como siempre, la derecha no asume sus responsabilidades.
Lo cierto es que trece candidatos de 37 partidos están postulados para participar en las elecciones del 28 de julio, y mientras la derecha tiene muchos candidatos y ningún proyecto, las fuerzas populares de la Revolución Bolivariana tienen un candidato, Nicolás Maduro, un programa elaborado por el pueblo y un proyecto de país.
La catástrofe de la Plataforma tiene explicación, ellos son los que andan en las conspiraciones para asesinar al Presidente Maduro, los que pidieron invasión militar, quienes le rogaron a los gringos para que nos impusieran las sanciones, organizaron incursiones mercenarias, pretendieron dar un golpe de Estado, son los herederos de Guaidó, ellos son la anti Venezuela.
Nosotros, los chavistas, creemos que la mejor política es la política de principios, estamos listos para la batalla electoral, enfrentaremos el nuevo plan de los gringos. ¡Nosotros Venceremos!
